Feria de Sevilla 2025: historia y 10 planes para estas fiestas
Si sois de los que pensáis que la capital andaluza tiene un color especial, esperad a verla durante su evento más importante del año. Queremos ayudaros a organizar vuestros planes para que sepáis qué hacer en la Feria de Sevilla, conocida también como Feria de Abril.
Una Portada engalanada con más de 20.000 bombillas, trajes de flamenca por doquier, casi 450.000 metros cuadrados de recinto festivo, más de dos millones de visitantes cada año, alrededor de 90.000 farolillos… Todo está cuidado al detalle para celebrar la fiesta laica más importante de la ciudad.
Os proponemos algunas ideas para que aprovechéis al máximo vuestra estancia en la capital andaluza. Pero, por supuesto, en Civitatis encontraréis muchas más excursiones, visitas guiadas y actividades en Sevilla. Aquí, simplemente os resumimos algunas de las más populares.
1. Bailar, cantar y ver un espectáculo de flamenco
Las sevillanas se han convertido en uno de los bailes y cantes más populares del mundo y, sin lugar a dudas, la Feria de Abril es una pura inmersión en el duende andaluz. Paseando entre sus casetas es más que habitual ver a gente demostrando todo su arte. ¡Seguro que vosotros también os animáis!
Más allá de la Feria, podéis reservar plaza en algún espectáculo de la ciudad. El show flamenco del Palacio Andaluz es uno de los más conocidos, una experiencia inolvidable que permite al público presenciar una original adaptación flamenca de la ópera Carmen. Bulerías, fandangos, soleás… ¡os quedaréis sin palabras!
No obstante, tenéis otras muchas alternativas, como el espectáculo flamenco en la Casa de la Guitarra, el Museo del Baile Flamenco o el Teatro Flamenco Triana.
2. Probar el rebujito
El rebujito es la bebida oficial de la Feria de Sevilla. Esta delicia, que resulta de la combinación de vino fino o vino manzanilla con refresco de limón, es la más consumida durante la temporada de festejos. ¿Os apetece probarlo?
Hablando de gastronomía, es habitual también tomar el llamado caldito de madrugá a altas horas de la mañana. La mejor forma de asentar el cuerpo y tomar energía para seguir con la fiesta. De camino a casa o el hotel, nada mejor que unos churros con chocolate para acabar de coronar la jornada.
3. Visitar el Alcázar, la Catedral y la Giralda
¿Y si aprovecháis la estancia en Sevilla para hacer una visita guiada por el Alcázar? Declarado Patrimonio de la Humanidad este recinto palaciego es una muestra exquisita de la herencia islámica en Andalucía. Es la residencia oficial de la Familia Real española cuando visita la ciudad, convirtiéndolo en el palacio real en uso más antiguo de Europa.
Por otra parte, otra de las paradas obligadas en la ciudad es la Catedral, uno de los templos góticos más grandes del mundo. Podéis explorarla a vuestro aire o reservando una visita guiada por la catedral de Sevilla para conocer en profundidad todas sus fases y secretos. Y para terminar, nada mejor que subir a la Giralda. Desde su mirador se obtiene una de las mejores vistas de la capital andaluza.
Si queréis unificar estos imprescindibles en un mismo día, el tour por el Alcázar, la Catedral y la Giralda es ideal para explorarlos en pocas horas. Asimismo, si tenéis tiempo suficiente en la ciudad, también podéis reservar una entrada para el Hospital de los Venerables, ubicado muy cerca de estos tres edificios históricos. Este antiguo sanatorio es un perfecto ejemplo de la arquitectura barroca sevillana del siglo XVII y fue construido originalmente para albergar a los sacerdotes jubilados.
4. Disfrutar de las atracciones de la calle del Infierno
La calle del Infierno es el lugar preferido por los niños, aunque los mayores también pueden disfrutar al máximo de este espacio. Se trata del parque de atracciones contiguo a la Feria y existen diferentes teorías sobre el origen de su nombre. Para unos, es una denominación jocosa en referencia a la ‘tortura’ que suponía a padres y abuelos acompañar a los pequeños de la casa por esta zona. Para otros, se refiere al ruido infernal que provocan las numerosas atracciones. Curioso, ¿verdad?
Coches de choque, tómbolas, toros mecánicos, montañas rusas y hasta una noria forman parte de este complejo, entre otras muchas actividades de ocio. ¡Diversión asegurada!
5. Dar un paseo en barco por el Guadalquivir
Y si preferís conocer la capital andaluza desde el agua, nada mejor que navegar por el Guadalquivir. Desde el río se pueden divisar zonas emblemáticas como la Isla de la Cartuja, sede de la Exposición Universal de 1992, la Torre del Oro o el mítico Puente de Tirana. ¡Ideal para obtener las mejores fotos de la ciudad!
A la hora de decidirse por un recorrido u otro, existen alternativas para todos los gustos, desde un paseo en barco por Sevilla estándar, una ruta privada o, incluso, una opción que incluye comida o cena.
6. Ir de bar en bar por Triana
En la Feria de Abril tendréis un mundo de posibilidades para disfrutar de los sabores sevillanos más auténticos. Tortilla, embutidos, gazpacho, guisos… sabores para todos los gustos os aguardan.
Sin embargo, no podéis iros de la ciudad sin antes hacer un recorrido gastronómico por el barrio de Triana, uno de los más famosos y concurridos. Si queréis conocer los bares más característicos de esta zona, os recomendamos reservar el tour de tapas por Sevilla. ¡Para chuparse los dedos!
7. Pasear en una calesa de caballos
Los carros de caballos son el vehículo oficial de la Feria de Sevilla. De hecho, son los únicos autorizados para pasar por las calles del recinto, a excepción de las ambulancias, coches oficiales y otros servicios imprescindibles.
Cada año más de 1.000 carruajes se adentran en la Feria ofreciendo paseos a los visitantes. Los precios son variables, pero la duración suele oscilar entre los 45 y los 60 minutos aproximadamente. En cualquier caso, si visitáis la ciudad en otra época del año también podéis reservar con Civitatis un paseo en calesa por el casco histórico de Sevilla.
8. Posar con el traje de flamenca en una sesión de fotos
La Feria de Sevilla es también una oportunidad para lucir elegancia y sofisticación. ¿Os veis guapos y guapas con los trajes típicos? ¡Pues hay que presumir de ello! Por este motivo, un buen plan puede ser reservar una sesión fotográfica privada en Sevilla. Tendréis un fotógrafo en exclusiva para vosotros y, por supuesto, podréis posar tanto con vestimentas tradicionales como con ropa casual. La decisión es vuestra.
9. Explorar la Plaza de España
Uno de los iconos monumentales de Sevilla se encuentra a escasos 15 minutos a pie de la Feria. Por ello, os animamos a reservar una visita guiada por la Plaza de España y el Parque de María Luisa para conocer la historia y todos los detalles de este lugar tan emblemático. ¿Sabíais que sirvió de rodaje en la saga Star Wars? ¿Y que está protegido como Bien de Interés Cultural?
Los bancos decorados con azulejos, las barcas recorriendo el estanque, la coqueta fachada del Museo de Artes y Costumbres Populares o la isleta de los Patos son algunos de los protagonistas de este espacio. Sin duda, uno de los lugares imprescindibles que ver en Sevilla.
10. Ver los fuegos artificiales de despedida
El espectáculo de pirotecnia es el colofón final de la temporada festiva, marcando oficialmente cuándo termina la Feria de Sevilla. Los fuegos artificiales se lanzan desde uno de los muelles del Guadalquivir, por lo que una gran opción para disfrutar del espectáculo es acudir a puentes como el de Triana, el de Los Remedios o el de las Delicias. Eso sí, conviene acudir con bastante antelación ya que la zona suele estar muy concurrida.
Otra posibilidad más tranquila es reservar mesa para tomar algo en algunas de las terrazas de los hoteles cercanos a la Feria de Abril.
Historia de la Feria de Sevilla
¿Sabíais que la Feria de Sevilla está declarada Fiesta de Interés Turístico Internacional? ¿Y que su primera edición se celebró en 1847? ¡Tiene más de 150 años de historia!
Pero… ¿quién inventó la Feria de Sevilla? Todo comenzó como una feria de ganado y, aunque la idea suene muy andaluza, fueron un concejal vasco y uno catalán quienes la organizaron por primera vez. Se trataba de un encuentro mercantil en el que se podía gestionar importantes acuerdos y, entre tanto y tanto, bailar y divertirse. Una feria-mercado autorizada por un decreto real de Isabel II.
La idea no paró de crecer y ganar público. De las 19 casetas iniciales de la primera edición, en menos de diez años los puestos ya se habían multiplicado hasta superar la centena. Se expidieron licencias para tabernas que quisieran ofrecer aperitivos y el espacio de mercado cada vez se fue reduciendo más a medida que la parte festiva crecía sin parar. ¿Os preguntáis cuántas casetas hay en la Feria de Sevilla hoy en día? ¡Más de 1.000 cada año!
Durante esta festividad, las calles se engalanan y los sevillanos lucen sus mejores trajes. El baile y el canto no faltan, y tampoco la exquisita gastronomía típica de la ciudad. Sobran los motivos para no perderse la Feria de Abril en Sevilla y es que, da igual vuestra procedencia, todo el mundo tiene un lugar en estos festejos. ¡Una de las fiestas más vistosas del mundo!
Preguntas frecuentes
Tras conocer los mejores planes para disfrutar de la Feria de Sevilla y descubrir un poco de su historia, llega el momento de aclarar algunas dudas que suelen ser frecuentes cuando se piensa en esta popular festividad andaluza. Para ello, hemos recopilado información práctica y útil para vosotros. ¡Seguid leyendo!
¿Cuándo es la Feria de Sevilla?
No existe una fecha fija. Esta importante festividad se celebra generalmente entre 7 o 14 días después de la Semana Santa. Por este motivo, Sevilla suele aparecer en las listas y rankings de destinos para viajar en abril.
Para conocer las fechas exactas, lo ideal es visitar cada año la página web oficial del Ayuntamiento de Sevilla.
¿Cuánto dura?
La Feria de Abril dura normalmente una semana, desde el alumbrado inicial hasta el gran espectáculo de fuegos artificiales junto al Guadalquivir que da por finalizadas las fiestas.
¿Cuáles son los mejores días para ir?
Cualquier día es bueno para disfrutar del animado ambiente de estas fiestas. Si bien es cierto que el fin de semana y la llamada noche del pescaito, que se celebra el día antes del inicio oficial de la Feria, son los momentos más concurridos.
La Feria de Sevilla abre habitualmente desde el mediodía hasta altas horas de la madrugada. El ambiente diurno es más familiar y permite contemplar mejor los trajes de los sevillanos y la decoración de las casteas. Por la noche, el espíritu es aún más festivo si cabe. ¡Pura diversión!
¿Cómo vestirse para la Feria de Sevilla?
Lo ideal es ir de flamenca, en el caso de las mujeres, y con el traje típico de chaqueta los hombres. Sin embargo, esto no es un requisito 100% indispensable. Lo importante es acudir con ropa elegante y, a ser posible, de textiles frescos para evitar el calor.
¿Se puede entrar en las casetas?
Hay que diferenciar entre las casetas públicas, que son accesibles para todos los visitantes, y las casetas privadas. En estas últimas, que son mayoría, tienen acceso restringido y sólo pueden acceder sus socios, familiares y amigos.
No obstante, el ambiente de las casetas públicas y el que se respira en las diferentes calles de la Feria de Abril hará que os lo paséis en grande tengáis o no amigos en la capital andaluza.