Qué ver en Niza: 10 imprescindibles en la capital de la Costa Azul
Glamurosa, pintoresca, festiva, coqueta… Si estáis planeando una escapada a la capital de la Costa Azul, os ofrecemos las mejores recomendaciones sobre qué ver en Niza. Esta colorida ciudad del sur de Francia alberga planes para todos los gustos y presupuestos: cafés y hoteles con historia, impresionantes museos para amantes del arte, extensas playas para broncearse bajo el sol del mar Mediterráneo…
Si, a todo ello, le sumamos una exquisita gastronomía y un calendario repleto de celebraciones, entre las que destaca el carnaval de Niza, tenemos como resultado un destino perfecto. ¿Planes culturales o culinarios? ¿Paseos por la playa o por el centro histórico? Si estáis buscando actividades en la Costa Azul, os proponemos diferentes planes en su hermosa capital.
1. El Paseo de los Ingleses, todo un imprescindible de Niza
Situado al borde de la bahía de los Ángeles, el Paseo de los Ingleses es uno de los bulevares marítimos más conocidos de la región Provenza-Alpes-Costa Azul. También alberga algunos de sus edificios más lujosos. El más conocido de todos es, sin duda, el Hotel Negresco. Este lujoso alojamiento cuenta incluso en su séptima planta con habitaciones para huéspedes VVIP: very, very important people.
El nombre de este conocido paseo marítimo proviene de la influencia de los turistas británicos que visitaban la urbe en el siglo XIX. Desde entonces, la ciudad no ha dejado de atraer visitantes y, en la actualidad, es uno de los destinos más populares de la Costa Azul. Prueba de ello es que este Promenade des Anglais, como se le conoce en francés, alberga numerosos espectáculos y conciertos al aire libre.
¿Y cómo recorrer de forma diferente el Paseo de los Ingleses? Una manera muy original es hacerlo a través de este tour en segway por Niza.
2. El Vieux-Nice, el corazón de la capital de la Costa Azul
Un laberinto de estrechas callejuelas y viviendas pintadas de vivos colores. Así podría definirse al Vieux-Nice, el corazón del centro histórico de Niza.
Uno de los emblemas del barrio es la Cours Saleya. Se trata de un popular mercado al aire libre en el que se venden flores frescas y productos típicos de la gastronomía local. De hecho, numerosos restaurantes y puestos de comida callejera rodean a esta conocida plaza de abastos.
Sin embargo, este barrio no sólo destaca por su mercado. Paseando por el Vieux-Nice también podréis encontrar monumentos tan destacados como la capilla de la Misericordia, la iglesia de la Anuciación o la catedral de Santa María y Santa Reparata. Una buena opción para descubrir todos estos lugares es el free tour por Niza.
3. La Colline du Château, las mejores vistas de Niza
Situada justo al lado del barrio del Vieux-Nice, la Colline du Château o colina del castillo ofrece las mejores vistas panorámicas de Niza. Este montículo de 90 metros de altura brinda unas excepcionales panorámicas de la bahía de los Ángeles y de los muelles del Port Lympia.
Asimismo, la colina ofrece un extraordinario patrimonio histórico. Desde un cementerio hasta unos vestigios arqueológicos medievales, pasando por una bella cascada artificial junto a un hermoso parque.
Si queréis disfrutar de las vistas más espectaculares de la capital de la Costa Azul, no os podéis perder entonces este tour en bicicleta eléctrica por Niza.
4. El Museo Matisse, indispensable para los amantes del arte
Henri Matisse descubrió Niza en 1917. A partir de entonces, quedó cautivado por su luz y su atmósfera mediterránea, que influyeron profundamente en su arte. Se instaló allí definitivamente en 1921 y, de hecho, permaneció en la ciudad hasta su muerte en 1954. Por ello, gran parte de sus obras más famosas fueron pintadas en la capital de la Costa Azul.
Actualmente, el Museo Matisse está situado en la magnífica Villa des Arènes. Se tata de una fabulosa mansión del siglo XVII, donde se rinde homenaje a este artista exponiendo una rica colección de sus creaciones.
Sin embargo, ese museo es mucho más que un homenaje a Matisse. Supone además adentrarse en un arte único, que se caracteriza por la búsqueda constante de la simplicidad, tanto en la armonía como en la forma y en el color. En definitiva, su visita es todo un imprescindible para los amantes del arte que recalen en Niza.
5. La catedral de San Nicolás, una joya ortodoxa muy desconocida
Muchos turistas que hacen un viaje a la Costa Azul no visitan, por puro desconocimiento, la catedral ortodoxa de Niza. Y es una pena, ya que este templo consagrado a San Nicolás se encuentra a pocos pasos de la parte trasera de la estación de tren.
De hecho, esta joya arquitectónica de principios del siglo XX es una de las iglesias ortodoxas más bellas construidas fuera de Rusia. Sus cúpulas y fachadas ricamente decoradas recuerda a las formas de la catedral de San Basilio, en Moscú. Declarada como Patrimonio Histórico, este templo fue impulsado por la comunidad rusa que se instaló en Niza en el momento de su construcción.
¿Y cuál es la mejor forma para contemplar la catedral? Si no deseáis caminar hasta este templo, que está un poco alejado del centro histórico, podréis observar desde fuera su preciosa arquitectura rusa a bordo del autobús turístico de Niza.
6. Las playas de Niza, un auténtico paraíso mediterráneo
Niza es famosa por sus magníficas playas, que atraen a visitantes que buscan nadar, tomar el sol o simplemente pasear por la arena. Justo a orillas de la bahía de los Ángeles se encuentran las playas Florida, Neptune y Blue Beach. Se trata de las más famosas del Paseo de los Ingleses.
Sin embargo, la ciudad también cuenta con otras ensenadas más íntimas, como la playa de Baie des Fourmis, situada un poco más al este, en el barrio de Beaulieu-sur-Mer. Especialmente apreciada por su entorno tranquilo y sus aguas cristalinas, ofrece paisajes bordeados de pinares y pequeñas calas. Se trata, por tanto, de un lugar perfecto para un momento de tranquilidad, desde donde apreciar una vista impresionante del mar y la montaña.
Otras playas, como La Réserve Beach o Coco Beach, os encantarán por su tranquilidad, ya que se encuentran alejadas de las multitudes. Sea cual sea vuestra elección, lo cierto es que las playas de Niza invitan a disfrutar plenamente del sol y del mar en un entorno impresionante.
7. El Jardín Exótico de Èze, un edén en las afueras de Niza
Situado a menos de media hora en coche de Niza, el pueblo de Èze es una auténtica joya situada sobre una colina, que ofrece un panorama excepcional del mar Mediterráneo y la Costa Azul. Este encantador pueblo medieval de calles empedradas y casas de piedra os sumergirá de lleno en el pasado. Sus tiendas de artesanía, galerías de arte y cafeterías con impresionantes vistas hacen de esta localidad un destino inolvidable.
No obstante, el gran atractivo de Èze es su famoso Jardin Exotique. Este precioso parque botánico está situado en lo alto del pueblo, sobre los restos de un antiguo castillo. Recorriendo sus senderos podréis admirar una gran variedad de plantas raras y mediterráneas. Además, es el lugar perfecto para tomar fotografías y disfrutar de la belleza natural de la zona.
¿Cuál es la mejor forma de ir a Èze? Existen varias posibilidades para desplazarse hasta este bello pueblo desde Niza:
8. La plaza Masséna, el coqueto salón de Niza
La Place Masséna es el verdadero corazón de Niza. Esta plaza, conocida como el elegante salón de la ciudad, es un espacio animado y colorido que destaca por sus viviendas de fachadas rojas y contraventanas verdes. La magnífica Fuente del Sol, presidida por una estatua de Apolo, ocupa el centro de la plaza. También veréis las siete esculturas que labró el artista español Jaume Plensa. Estas figuras sentadas, que simbolizan los continentes, no suelen pasar desapercibidas.
Por otro lado, esta gran explanada peatonal es ideal para pasear, hacer compras bajo los soportales o simplemente sentarse en una terraza a disfrutar del ambiente. La plaza está conectada además con el casco antiguo, el Jardín Alberto I y el Paseo de los Ingleses, por lo que es un punto de partida perfecto para empezar a explorar Niza.
En el tour privado por Niza recorreréis en exclusiva con un guía en español esta plaza y sus alrededores, que resultan perfectos para caminar e impregnarse del coqueto ambiente de la ciudad.
9. El Jardín Alberto I, el oasis de Niza
En toda lista que se precie sobre qué ver en Niza, tampoco puede faltar el Jardín Alberto I. Este oasis de verdor se encuentra junto al Promenade des Anglais, justo enfrente del mar Mediterráneo.
La fuente de los Tritones preside la entrada a este bonito parque, donde también encontraréis un teatro al aire libre. Con la llegada del buen tiempo, este espacio llamado Théâtre de Verdure hace las delicias de los aficionados a las representaciones escénicas.
El parque de Alberto I es uno de los lugares que se visitan en este tour en tuk tuk por Niza, que os permitirá recorrer de una forma cómoda y diferente el centro de la ciudad.
10. Recorrer los pueblos más bonitos de la Provenza
Ahora que ya sabéis qué ver y hacer en Niza, también os podéis plantear visitar alguno de los preciosos pueblos de la Provenza situados a su alrededor.
Saint-Paul-de-Vence o Grasse, la capital mundial del perfume, se encuentran a menos de una hora en coche de Niza. Por otro lado, merece la pena visitar otras poblaciones como Gourdon, Antibes, Cannes o Menton. También se encuentra muy cerca el Principado de Mónaco, uno de los países más pequeños de Europa.
Si queréis conocer Gourdon, Saint-Paul-de-Vence y otras poblaciones en un mismo día, os recomendamos esta excursión por los pueblos de la Provenza con salida desde Niza.
Arte y cultura, arquitectura, glamur en hoteles históricos, playas de postal… Si ya habéis escogido la capital de la Costa Azul como vuestro próximo destino, solo os falta para completar vuestro viaje escogiendo alguno de los tours, visitas guiadas y excursiones en Niza que tenéis a vuestra disposición. Bon voyage!
Lo más leído #Francia