Qué ver en Montreal, la segunda ciudad más poblada de Canadá

Preciosos monumentos, apacibles parques, grandes espacios naturales en sus alrededores y una gran oferta cultural y gastronómica son las señas de identidad de la mayor urbe de la provincia de Quebec. Este destino es además la segunda ciudad más poblada de Canadá. Por ello, si estáis planeando un viaje a esta fascinante metrópoli, os explicamos qué ver y hacer en Montreal, donde disfrutaréis de grandes atractivos para todos los gustos. On y va!
1. El Vieux-Montreal, el casco viejo de la ciudad
Situado a orillas del río San Lorenzo, el Vieux-Montreal es el corazón de la ciudad. Se trata de un pintoresco barrio de calles adoquinadas con bellas obras arquitectónicas que datan de los siglos XVIII y XIX. Esta zona de la urbe tiene un ambiente verdaderamente europeo, con diferentes monumentos que hacen referencia a la fundación de la ciudad, en 1642. Además, este distrito alberga lugares tan emblemáticos como el Hôtel de Ville, el edificio del Ayuntamiento, o el Mercado de Bonsecours.
En esta visita guiada por Montreal recorreréis a pie su distrito más antiguo, donde además de contemplar el Consitorio y el mercado citados anteriormente, también veréis el parque Champ de Mars o la céntrica Place Jacques-Cartier.

2. La basílica de Notre-Dame, un intento por revivir el gótico
Merece una mención aparte la basílica de Notre-Dame, la gran joya del Vieux-Montreal. Fue construida en la primera mitad del siglo XIX, en una época en la que se intentaba revivir el viejo estilo gótico europeo a través de una nueva corriente arquitectónica: el neogótico. Si ya el templo impresiona desde su exterior, que podréis contemplar con la visita guiada citada en el apartado anterior, su interior os dejará sin palabras. ¿El motivo? Sus impresionantes vidrieras y el intenso color añil de sus techos.
También merece la pena contemplar L’expérience AURA. Se trata de un espectáculo audiovisual que tiene lugar en el interior de la basílica. Durante la función, diversas luces acompañadas de música orquestal iluminan las diferentes pinturas y esculturas de Notre-Dame, creando un ambiente muy especial.

3. El río San Lorenzo, un icono para ver y navegar en Montreal
El río San Lorenzo es la gran autopista fluvial de este de Canadá, ya que conecta las ciudades de Montreal y Quebec. Debido a las bajas temperaturas que se registran en la zona, su navegación suele ser complicada en otoño e invierno. Sin embargo, durante la época de primavera y verano, podréis disfrutar de este paseo en barco por Montreal. Se trata de una travesía muy apacible por el río San Lorenzo, que os permitirá contemplar desde la embarcación las islas Boucherville, el Estadio Olímpico y el puente Jacques-Cartier.
Además, si queréis ver la ciudad bajo la luz de las estrellas, este paseo en barco nocturno por Montreal os descubrirá la preciosa iluminación de la urbe al caer la tarde.

4. La noria Grande Roue, todo un icono para ver en Montreal
Situada en la ribera del río San Lorenzo, frente al Vieux-Montreal, la Grande Roue es la noria más grande de Canadá. ¡Su altura es la misma que la de un edificio de 20 pisos! Desde sus cabinas, contemplaréis la isla sobre la que se asienta la ciudad. Además, disfrutaréis de unas extraordinarias panorámicas del río y del Mont-Royal.
Con esta entrada a la noria Grande Roue de Montreal, disfrutaréis de un recorrido de 20 minutos en el que no sólo veréis el skyline de la ciudad, sino también los ríos y los verdes parajes de sus alrededores.

5. Omega Park, una joya natural en las afueras de Montreal
Canadá destaca por su increíble belleza natural. De este modo, si disponéis de varios días, os recomendamos este safari por Omega Park. Este parque, situado a una hora y media de Montreal, constituye uno de los espacios naturales con mayor biodiversidad de Quebec.
A lo largo del safari, tendréis la posibilidad de avistar alces, ciervos, osos y lobos en su hábitat natural. Asimismo, se trata de un espacio natural de gran diversidad ornitológica, ya que podréis contemplar distintas clases de pájaros azules, pájaros carpinteros y pinzones.

6. Los puestos callejeros de comida, todo un referente gastronómico
Montreal es uno de los principales destinos gastronómicos de Canadá. Gran parte del éxito culinario de la ciudad se debe a sus numerosos puestos de comida callejera, pero también a su gran oferta de restaurantes. La principal especialidad local es sin duda la poutine. Se trata de un plato de patatas fritas al que se le añade queso cheddar, salsas de diferentes tipos e, incluso, distintas clases de carne.
Otro plato imprescindible es la tourtière, un pastel de carne canadiense que, generalmente, está elaborado con cerdo, ternera o una mezcla de carnes. Además, está sazonado con especias como canela o clavo, lo que le convierte en una receta aún más apetitosa si cabe.
En este tour gastronómico por Montreal podréis degustar las especialidades mencionadas, así como también otras irresistibles recetas que os harán la boca agua.

7. Centre Bell, el templo del hockey sobre hielo
El hockey sobre hielo es el deporte nacional de Canadá. De hecho, fue el país que inventó esta disciplina, que deriva del tradicional hockey sobre hierba. La NHL, la National Hockey League, es la mejor liga del mundo en la modalidad sobre hielo. Se trata de una competición profesional en la que participan franquicias tanto de Estados Unidos como de Canadá, agrupadas en dos conferencias: este y oeste.
En la oriental, uno de los equipos más destacados es el de los Montreal Canadiens, que disputa sus encuentros dentro de la División Atlántico. Este club es conocido como los Habs, y tiene su sede en el estadio Centre Bell. El pabellón se encuentra en una de las zonas más privilegiadas de la ciudad, muy cerca del puerto.
Si deseáis asistir en directo a un encuentro oficial, podéis reservar una entrada para un partido de la NHL de los Montreal Canadiens.

8. El RÉSO, el complejo subterráneo más grande del mundo
En Montreal, al igual que sucede en el resto de Canadá, los inviernos son muy rigurosos. ¿Sabéis cómo combaten el frío los habitantes de la ciudad? ¡Bajo tierra! Y sí, habéis leído bien. De hecho, todo turista que llega a la urbe por primera vez no se puede perder el RÉSO. Se trata, nada más ni nada menos, que de la red peatonal subterránea más grande del mundo.
Esta red de túneles y pasadizos conecta universidades, centros comerciales u hoteles sin necesidad de tener que salir al exterior. Sus diferentes galerías bajo tierra cubren una distancia de 30 kilómetros, o lo que es lo mismo: unas 41 manzanas en una superficie de aproximadamente 12 kilómetros cuadrados. Sorprendente, ¿verdad?
Si queréis descubrir cómo es la ciudad bajo tierra, no os perdáis esta visita guiada por el Montreal subterráneo.

9. Los museos de Bellas Artes e Historia, dos grandes referentes culturales en Montreal
La rue Sherbrook alberga dos de los mejores museos de Montreal, por lo que esta calle es todo un imprescindible para los amantes del arte y la cultura.
El primero de ellos es el Museo de Bellas Artes. Su exposición permanente, una de las más visitadas de Canadá, cuenta con una extraordinaria colección de pinturas y esculturas. En sus salas encontraréis una amplia variedad de arte de Quebec y de otras zonas de Canadá, arte inuit y arte contemporáneo. También se exhiben distintas piezas de Egipto, Grecia, Roma, Japón y otras culturas de los cinco continentes.
El otro gran referente cultural de la rue Sherbrook es el Museo McCord, dedicado a la historia de Canadá. En su exposición podréis ver desde objetos etnográficos y arqueológicos de los pueblos indígenas hasta fotografías, grabados y prendas textiles.

10. El parque Mont-Royal, el gran pulmón verde de Montreal
Diseñado por el famoso paisajista Frederick Law Olmsted, el Mont-Royal es un exuberante oasis urbano en el corazón de Montreal. El parque ofrece una gran variedad de actividades al aire libre durante todo el año, desde senderismo y ciclismo hasta pícnics y deportes de invierno.
Una de las atracciones más populares del parque es el lago de los Castores, donde podréis alquilar botes de remos durante los meses más cálidos. Navegar por esta tranquila laguna ofrece una perspectiva única de la belleza natural del parque y, además, disfrutaréis de una hermosa panorámica de Montreal.
A los pies del parque se extiende uno de los barrios más pintorescos de la urbe, que podréis descubrir en esta visita guiada por Plateau Mont-Royal y Mile End.

Consejos para visitar Montreal
Tras conocer qué ver y hacer en Montreal, os ofrecemos a continuación algunos consejos prácticos:
¿Qué idiomas se hablan?
El francés es el idioma oficial de Montreal, al igual que en el resto de Quebec. Sin embargo, no os preocupéis si no habláis la lengua de Molière, ya que la mayoría de los habitantes de la ciudad también hablan inglés.
¿Cuál es la mejor época para viajar?
Ante todo, se debe evitar viajar entre noviembre y marzo. Durante ese periodo, las temperaturas rondan los 20 grados bajo cero y las nevadas son constantes. Por ello, la mejor época para visitar Montreal es entre mayo y septiembre.
¿Cómo moverse?
Montreal cuenta con un fantástico sistema de transporte público. Las redes de metro y autobús son extensas y están muy bien conservadas. Se trata, además, de una de las mejores ciudades de Norteamérica para recorrer en bicicleta.
Planes culturales y gastronómicos, parques urbanos y naturales, partidos de hockey… Hay un montón de tours, visitas guiadas y experiencias en Montreal de las que podréis disfrutar. ¿Ya habéis planificado vuestro viaje?