Qué ver en Chefchaouen

Escondido entre las montañas del Rif se encuentra uno de los tesoros de Marruecos conocido como ”la Perla Azul”. Hablamos de Chefchaouen, un destino mágico que cautiva a todo aquel que se anima a visitarlo. Esta encantadora ciudad se caracteriza por sus calles estrechas y sus casas pintadas del azul más vibrante. Si estáis en alguna ciudad del norte del país como Tetuán o Tánger, no podéis dejar de hacer una escapada a este increíble lugar. ¿Por qué? En Civitatis os contamos todo lo que ver en Chefchaouen para que no os perdáis nada. ¡Empezamos!

Recorrer la Medina y sus calles color añil

El primer lugar que ver en Chefchaouen se encuentra en el corazón de la ciudad, y es su antigua Medina. Una de las mejores formas para disfrutar de ella y descubrir su encanto, es perderse entre sus estrechas y sinuosas calles pintadas de azul. Allí también tendréis la oportunidad de explorar los famosos zocos, donde encontraréis una amplia variedad de productos artesanales, como cerámica, alfombras y prendas de vestir.

Paseando por la Medina Chefchaouen, tampoco podéis olvidar deteneros en la Plaza Uta el-Hammam, donde podréis disfrutar de un típico té de menta mientras observáis la vida cotidiana. Si queréis descubrir a fondo la ciudad azul, no os podéis perder este tour privado por Chefchaouen. ¿Hay algo mejor que ver Chefchaouen con un guía solo para vosotros?

La arquitectura de la Gran Mezquita

Si hay un edificio que destaca dentro de la Medina de Chefchaouen es su Gran Mezquita, un lugar sagrado y una de las joyas arquitectónicas de la ciudad. Y llama la atención precisamente por no estar cubierta del intenso color añil que decora el resto de las calles. Su fachada blanca y su minarete octogonal contrastan a la perfección con el fondo azul de la ciudad. Podréis deteneros frente a su fachada para admirar su impresionante arquitectura y, por supuesto, inmortalizar el momento.

Una foto de recuerdo en la Puerta de Bab el Ain

El próximo lugar que ver Chefchaouen es la Puerta de Bab el Ain, una de las principales entradas a la Medina y una de las antiguas puertas de la muralla. Este acceso monumental, con su distintivo arco azul, es un punto de referencia importante y una parada obligatoria para tomar fotos. Desde aquí podréis vislumbrar la belleza azul de las calles que se extienden más allá de la entrada, y que os invita a explorar más a fondo.

La Alcazaba, otro de los lugares que ver en Chefchaouen

¿Siguiente parada? La Alcazaba de Chefchaouen. Esta antigua fortaleza que ofrece unas panorámicas impresionantes de la ciudad y sus alrededores. Podréis subir caminando hasta el lugar que ocupa en lo más alto de la colina y maravillaros con las vistas de los tejados azules y las montañas que rodean Chefchaouen.

En la Alcazaba encontraréis un museo dedicado a la cultura y la historia de la ciudad. Allí podréis explorar sus salas y aprender sobre la herencia bereber y la influencia árabe que han dado forma a la ciudad. También podréis disfrutar de sus jardines, que son un remanso de paz en medio del bullicio de la Medina.

Además, en el camino hacia la Alcazaba encontraréis hermosos rincones para posar y haceros algunas fotografías que captan a la perfección la esencia de la ciudad. ¡Os sentiréis como auténticos influencers!

Naturaleza en estado puro en las montañas del Rif

Chefchaouen está rodeada por las majestuosas montañas del Rif, cuyas cimas no superan los 2000 metros de altura y lo convierten en un lugar ideal para los amantes del senderismo y la naturaleza.

Desde Chefchaouen podréis emprender varias excursiones y recorrer los senderos que serpentean las montañas. En el camino disfrutaréis de las vistas de un paisaje de valles sorprendentemente verdes. ¿Qué os parece acompañarnos en esta ruta privada de 4 días de trekking por el Rif?

Un momento de desconexión en los baños árabes

Un viaje a Chefchaouen no estaría completo sin sumergirse en la relajante experiencia de los baños árabes. Estos espacios tradicionales ofrecen un oasis de tranquilidad donde disfrutar de un masaje relajante y dejaros envolver por una atmósfera de aromas y colores. En definitiva, los baños árabes son un lugar perfecto para desconectar y recargar energías tras explorar la ciudad.

Degustar la deliciosa gastronomía marroquí

Explorar Chefchaouen también significa deleitarse con los sabores de su gastronomía. No os podéis perder la oportunidad de probar platos típicos como el tajine, el cuscús y la pastela marroquí. De esta forma, os sumergiréis en la cultura culinaria de Chefchaouen y descubriréis los sabores especiados y exquisitos tan típicos de la cocina marroquí. Nosotros os proponemos este tour gastronómico por Chefchaouen. ¡Una auténtica delicia para el paladar!

Contemplar el atardecer desde la Plaza Outa el Hammam

Antes de que acabe vuestra ruta por Chefchaouen, no os podéis perder el momento más mágico del día: ver el atardecer en la Plaza Outa el Hammam. Nada mejor que hacer una parada en uno de los típicos cafés con terraza y disfrutar viendo cómo el sol se pone y tiñe de tonos dorados los tejados azules de la ciudad. ¡Será un auténtico espectáculo visual!

Una escapada a las cascadas de Akchour

A pocos kilómetros de Chefchaouen se encuentran las espectaculares cascadas de Akchour, un verdadero paraíso natural. Dependiendo que el tiempo que queráis dedicar a visitar este lugar, podréis hacer una excursión privada a las cascadas de Akchour o también una ruta privada de 2 días de trekking. ¿Cuál preferís?

No importa si buscáis cultura, relajación, aventura o conexión con la naturaleza, Chefchaouen tiene algo que ofrecer a todo aquel que la visita. Desde las montañas del Rif hasta la característica arquitectura azul de la ciudad, terminaréis vuestra visita completamente enamorados de la Perla Azul de Marruecos. ¡No cabe duda!