Los 10 pueblos más bonitos de Cantabria
Cantabria suena a mar, montañas, calles empedradas, verdes paisajes y una deliciosa gastronomía. La comunidad autónoma alberga una gran cantidad de joyas arquitectónicas y de tesoros naturales que enamoran a todo aquel que la visita. Desde su costa hasta el interior, Cantabria es un destino perfecto para desconectar del estrés de las grandes ciudades y al que acudir siempre que se quiera conectar con la naturaleza y con los valores tradicionales mejor conservados. Pero, ¿cuáles son los pueblos bonitos de Cantabria más maravillosos?
Desde Civitatis hemos hecho nuestra particular selección para que podáis organizar vuestro viaje a esta comunidad autónoma del norte de España y no os dejéis ningún rincón por descubrir. ¡Comenzamos!
1. Santillana del Mar
Entre los pueblos bonitos de Cantabria no podía faltar esta villa, conocida como el pueblo de las tres mentiras: ni es santa, ni llana, ni tiene mar. Santillana del Mar cuenta con un patrimonio histórico-artístico que traslada a cualquiera que pisa sus calles empedradas al esplendor medieval que vivió la localidad.
La Colegiata de Santa Juliana, las torres de Merino y Don Borja, las casas del Águila y la Parra, el palacio de Velarde o los palacios de Barreda, Tagle y Villa son algunos de los preciosos lugares que podréis disfrutar participando en un free tour por Santillana del Mar o en una ruta privada.
Además, si venís a este precioso pueblo cántabro, no podéis dejar de reservar una visita guiada por la Neocueva y Museo de Altamira. Denominada como la Capilla Sixtina del arte paleolítico, es uno de los yacimientos arqueológicos más importantes del mundo. Fue descubierta por casualidad a finales del siglo XIX y debido a su fragilidad, actualmente se puede explorar exclusivamente una réplica a tamaño real de las cavernas. Sin embargo, esto no impide que el lugar impresione a todo aquél que lo visita.
2. Liérganes
Liérganes alberga un conjunto urbano declarado de interés histórico-artístico nacional desde el año 1978. Su importante arquitectura clasicista de los siglos XVII y XVIII la han convertido en uno de los pueblos bonitos de Cantabria imprescindibles para cualquier amante del turismo rural. Destacamos de este lugar El Mercadillo, las casonas populares, el Palacio de Rañada o la iglesia de San Sebastián. Os animamos a consultar nuestra completa sección de excursiones, visitas guiada y actividades en Liérganes.
Como añadido, a menos de 10 minutos en coche del centro de esta localidad se encuentra el balneario Castilla Termal Solares, un lugar perfecto para relajarse y disfrutar de la naturaleza que rodea a Liérganes.
3. Comillas
Esta aristocrática villa asentada sobre unas suaves colinas cuenta con una historia que nos lleva directamente a la prehistoria, tal y como indican las cuevas de La Meaza, con pinturas rupestres de hace más de 14000 años. Si nos centramos en su casco histórico, llaman la atención la plaza vieja, la iglesia parroquial y las grandes casonas del centro de la villa. Además, los preciosos edificios de finales del siglo XIX y principios de XX no pasan inadvertidos, ya que fue esta época en la que Comillas estuvo en la cima económica y social de Cantabria.
Pero si hay algo famoso en esta localidad es el Capricho de Antonio Gaudí, una de las pocas obras del artista realizadas fuera de Cataluña. La visita guiada por Comillas junto con el Capricho de Gaudí es perfecta para descubrir la historia de uno de los pueblos más bonitos de Cantabria. ¡No os arrepentiréis de conocer este rincón! En cualquier caso, si preferís explorar la zona a vuestro aire, podéis decantaros simplemente por adquirir la entrada al Capricho de Gaudí.
4. Castro Urdiales
Tal y como hablábamos al principio, muchos pueblos de Cantabria son sinónimo de tradición marinera y pesquera, y eso se puede encontrar sin apenas esfuerzo en Castro Urdiales. Mientras se pasea por las calles del casco viejo de la localidad se puede comprobar de primera mano esta ancestral práctica económica gracias a sus edificios con balconadas de madera.
Asimismo, el patrimonio monumental de Castro Urdiales está compuesto de grandes obras arquitectónicas tales como el puente medieval, la ermita de Santa Ana, el palacio Toki-Eder o la iglesia de Santa María, considerada como la mejor obra gótica de la comunidad. Una de las mejores formas que se nos ocurre de conocer este bonito pueblo de Cantabria es participando en un tour privado por Castro Urdiales, una opción perfecta para indagar en el pasado de estas tierras.
5. Bárcena Mayor
Bárcena Mayor es un pequeño pueblo enclavado en medio del valle del Saja, alejado de cualquier carretera principal y ajeno a la arquitectura moderna. La tradición cántabra se respira nada más pisar sus calles, pobladas de grandes casonas de los siglos XVII y XVIII cuyos balcones de madera, su artesonado tradicional y su decoración llena de flores invitan a la desconexión y despiertan el amor por lo tradicional.
Declarado conjunto histórico-artístico en 1980 gracias al buen estado de conservación de su arquitectura típica montañesa, una de las actividades que podéis realizar después de explorar su casco urbano es una de sus numerosas rutas de senderismo que parten desde Bárcena Mayor o disfrutar de su deliciosa gastronomía en alguno de sus restaurantes.
6. Potes
Potes es otro de los pueblos bonitos de Cantabria, y son muchas las razones que nos llevan a afirmarlo. Rodeado de un fascinante entorno de montañas y muy cerca del Desfiladero de La Hermida, Potes es conocida como la villa de los puentes y las torres, entre las que destacan la del Infantado y la de Orejón de la Lama. Pasear por sus callejuelas y admirar los caserones con blasones implica transportarse directamente a la época medieval, rememorando las luchas que se llevaron aquí entre las casas de los Mendoza y los Manrique.
Asimismo, la localidad cántabra es un punto clave en el Camino Lebaniego y, debido a su ubicación, es un perfecto inicio para realizar una excursión al monasterio de Santo Toribio de Liébana y a los Picos de Europa. ¡Un lugar perfecto para pasar un día durante cualquier viaje a Cantabria!
7. San Vicente de la Barquera
¡La villa marinera por excelencia! San Vicente de la Barquera cuenta con una de las estampas más bonitas de toda la Cornisa Cantábrica. Desde sus fantásticas playas, como la de Merón, El Cabo o La Fuente, hasta su preciosa ría habitada por un sinfín de botes y barcas de colores, una seña de identidad de la localidad.
Si nos adentramos en su casco histórico, podemos admirar numerosos edificios llenos de encanto como la iglesia, el castillo y los restos de la muralla. Para terminar de convenceros, San Vicente de la Barquera cuenta con unas fascinantes vistas de los siempre majestuosos Picos de Europa, ingredientes más que suficientes para considerarlo como uno de los pueblos de Cantabria que hay que visitar al menos una vez en la vida.
Si echáis un ojo a nuestra propuesta de excursiones, visitas y actividades en San Vicente de la Barquera encontraréis una amplia oferta de planes en esta zona y en otros pueblos de los alrededores. Encontraréis desde experiencias centradas en la historia de la región hasta experiencias de aventura y naturaleza.
8. Laredo
Seguimos conociendo las villas marineras de Cantabria y, en esta ocasión, nos fijamos en Laredo. ¿Sabíais que este pequeño pueblo aparece en el afamado libro Don Quijote de La Mancha? Ubicada entre la ría de Treto y la bahía de Santoña, esta localidad es un imprescindible en todo viaje por los pueblos de Cantabria.
Para visitarla, debéis tener en cuenta los tres sectores en los que se dividen la villa: la Puebla Vieja y el Arrabal, la zona del Ensanche y el Puntal. La primera de ellas fue declarada conjunto histórico artístico en los años 70 ya que aún conserva restos de las murallas de la Edad Media. En el Ensanche se encuentra el área comercial y, por último, el Puntal cuenta con tres enormes avenidas flanqueadas por sus playas. ¡Laredo lo tiene todo!
9. Suances
Nos acercamos al final de esta lista de pueblos bonitos de Cantabria y no podíamos dejar de hablar de Suances, uno de los destinos favoritos por los surfistas. La localidad está asentada en la desembocadura de la ría de Suances, formada por la unión de los ríos Saja y Besaya. Aquí se crea un puerto natural entre acantilados donde numerosos historiadores ubican el famoso puerto romano Portus Blendium.
Las playas de Tagle, Los Locos, La Ribera o La Tablía completan el turismo marítimo imprescindible para conocer este pueblo de Cantabria. En caso de que os apetezca más pasear por la ciudad, la ermita del Carmen o el convento de Santo Domingo son realmente bellos.
Para no perderos detalle de todo lo que os espera en esta coqueta localidad, podéis consultar nuestro completo listado de excursiones, tours y actividades en Suances.
10. Carmona
Para cerrar la lista de pueblos bonitos de Cantabria, nos detenemos en Carmona y en su tradicional arquitectura de montaña. Sus casonas son un auténtico tesoro, entre las que destacan la casona de los Díaz Cossío y Mier.
A pesar del pequeño tamaño de este pueblo, en pleno valle de Cabuérniga, es un lugar ideal para descubrir la tradición de Cantabria, ya que es muy común ver a sus habitantes con albarcas, un tipo de calzado rústico realmente curioso. ¡El broche de oro a cualquier ruta por la comunidad norteña!
Seguro que tenéis muchas ganas de visitar estos pueblos de Cantabria. No obstante, si os apasiona el turismo rural, os animamos a echar un vistazo a otros artículos que os hemos preparado para vosotros sobre las localidades del norte de España:
- Ruta en coche por el norte de España.
- Guía para visitar la Rioja Alavesa.
- Los 10 pueblos más bonitos de Teruel.
- Los 10 pueblos más bonitos de los Pirineos.
En cualquier caso, si queréis centrar vuestros esfuerzos en una única Comunidad Autónoma, ya sabéis que en Civitatis encontraréis siempre las mejores excursiones, visitas guiadas y actividades en Cantabria.
Cantabria es preciosa de punta a punta. No me canso de ir una y mil veces a Santillana del Mar, Liérganes, Potes…
Hola Patricia, ¡muchas gracias por leernos! Nos alegra saber que amas estas tierras del norte y esperamos que este artículo te haya generado aún más ganas de seguir explorando los pueblos más bonitos de Cantabria.