Guía para visitar la Rioja Alavesa

La Rioja Alavesa es el destino ideal para un viaje de enoturismo. Paisajes de viñedos y pueblos medievales enclavados entre el País Vasco, Navarra y La Rioja son los protagonistas indiscutibles de una de las rutas del vino más famosas de España.
Si estáis planeando una escapada que englobe los dos grandes atractivos de la zona, desde Civitatis os echamos una mano con esta guía para visitar la Rioja Alavesa, perfecta para realizarla en un fin de semana. ¡Os encantará!
Laguardia
Este pequeño pueblo alavés es una verdadera delicia para los sentidos. Pasear por sus calles empedradas, conocer sus murallas o adentrarse en sus iglesias es todo un disfrute para aquellos que llegan a Laguardia, capital de la Rioja Alavesa. Su esencia medieval se respira en cada rincón, pero, sin ninguna duda, la iglesia de Santa María de los Reyes y, en especial, su pórtico, son auténticos tesoros.

Esta puerta de arcos apuntados mantiene la policromía original, construida en piedra tallada a finales del siglo XIV y pintada tan solo dos veces a lo largo de su historia. ¿Sabíais que no se restaura desde el siglo XVII? ¡Este pórtico es una joya bien guardada de Laguardia!
Asimismo, además de conocer esta villa, visitar las bodegas de Laguardia es un imprescindible en cualquier ruta enológica que se realice en esta zona. Desde bodegas llenas de tradición y belleza como puede ser El Fabulista, a 7 metros de profundidad bajo un palacio del siglo XVII, hasta bodegas de una arquitectura moderna y vanguardista como la bodega Ysios, diseñada por el siempre controvertido Santiago Calatrava.
Desde Civitatis os proponemos hacer una visita guiada por Laguardia y reservar una visita a las bodegas Campillo o a las bodegas Solar de Samaniego. Si no podéis ir por vuestra cuenta a la capital de la Rioja Alavesa, una buena opción es hacer una excursión a Laguardia y a dos bodegas de la Rioja Alavesa saliendo de San Sebastián. Sea como sea, la localidad es un imprescindible en cualquier guía para visitar la Rioja Alavesa.
Elciego
La carretera que nos lleva hasta la localidad de Elciego nos desvela en el horizonte uno de los edificios más futuristas de España. ¿De qué se trata? ¡Efectivamente! Rodeado de un paisaje de campos de vid, el arquitecto canadiense Frank O. Gehry ideó la llamada catedral de Marqués de Riscal.

Cualquier amante del vino tiene en su guía para visitar la Rioja Alavesa la bodega Marqués de Riscal que, además de ser una de las bodegas más antiguas de España, esta maravilla arquitectónica acoge La catedral del Vino, con la colección de vino antiguo más grandes de todo el mundo. ¡Es una auténtica fantasía!
Para completar la experiencia, es casi obligatorio acercarse a la villa de Elciego y pasear por su casco histórico. Las calles empedradas, las casas blasonadas, la plaza Mayor y la iglesia de San Andrés harán que paséis un día inolvidable.
Lanciego
Una de las señas de identidad de hacer turismo en España es su gastronomía, y en la Rioja Alavesa no iba a ser menos. La ruta nos lleva directamente a Lanciego, una villa que presume de estar rodeada de vides y olivos y, por ende, ser rica en aceite y vino, dos de los productos estrella del país.
Lanciego posee uno de los últimos y más antiguos Trujales de la Rioja Alavesa, una prensa de aceitunas y molino de aceite con el que se mantiene vivo el pasado elaborando aceite de forma totalmente artesanal una vez al año.

Además de recorrer las calles de Lanciego y disfrutar de sus estructuras de piedra tradicionales, a tan solo 10 minutos en coche encontramos el famoso dólmen de La Chabola de la Hechicera, un monumento megalítico funerario en perfecto estado de conservación. ¡Otro imprescindible en nuestra guía para visitar la Rioja Alavesa!
Lapuebla de Labarca
Vamos cerrando esta completa guía para visitar la Rioja Alavesa en el pequeño municipio de Lapuebla de Labarca. A orillas del río Ebro, esta localidad cuenta con una sorprendente historia y una belleza protagonizada por sus casas de estilo renacentista con escudos en las fachadas, que se mantienen a la perfección en su casco antiguo.

En Lapuebla de Labarca también encontramos un mirador desde el que hay una inolvidable panorámica del Ebro y de los extensos viñedos de la zona, otro de sus grandes atractivos. Para concluir cualquier ruta enológica, es vital seguir descubriendo la cultura del vino, y en Lapuebla de Labarca se pueden visitar y degustar exquisitos caldos. Os proponemos la bodega Jilabá o las bodegas Loli Casado.
Logroño
Lo sabemos. Logroño no pertenece a la Rioja Alavesa, pero no podíamos terminar esta selección sin asomarnos a la capital de La Rioja. Ya sea para finalizar cualquier ruta del vino por estas tierras o como para comenzarla, Logroño cuenta con un sinfín de atractivos monumentales que merece la pena explorar.

La concatedral de Santa María la Redonda, la calle Laurel, la muralla del Revellín o la plaza del Mercado son algunos de los puntos imprescindibles a descubrir en Logroño. Os aconsejamos reservar un free tour para conocer todos los secretos de la ciudad riojana. ¡El broche perfecto a un viaje inolvidable!
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