¿Por qué no te puedes perder la Feria de Abril?
”Hay un aire diferente al llegar el mes de abril, hay un aroma y un cante que dan ganas de vivir”. Y es que como bien resuena en esta bonita canción, durante una semana de abril al año, Sevilla se transforma en tradición, buena comida, en la alegría de su gente, el cante, el baile y el aleteo de los coloridos volantes que adornan los preciosos trajes de las flamencas. Si estas razones no te parecen suficientes, hoy en Civitatis, te contamos por qué no te puedes perder la Feria de Abril. ¡Toma nota!
El ambiente de las casetas
”Lo que pasa en las casetas se queda en las casetas”. En el interior de estos espacios es donde la Feria de Abril cobra vida. Cada caseta de las más de mil que se engalanan para estos días, pertenece a grupos de amigos y familiares que se pasan el año organizando la fiesta. No todas son accesibles al público, pero sí que hay suficientes para disfrutar de la Feria aunque no conozcas a nadie de la ciudad hispalense.
No es un misterio lo que ocurre dentro de las casetas: sevillanas hasta que te duelan los pies, rebujitos, buena comida y, para rematar el intenso día, churros con chocolate. ¡La diversión está asegurada!
El ‘alumbrao’ de los farolillos y la Portada
Otra de las razones por las que no te puedes perder la Feria de Abril de Sevilla es por su luz. En la primera noche se encienden los farolillos, lo que comúnmente se conoce como el ‘alumbrao’. Con la famosa Portada cubierta con más de 20000 bombillas, el Real de la Feria se convierte en una pequeña ciudad que se ilumina con miles de bombillas y guirnaldas.
Las calles adoquinadas lucen engalanadas, y las casetas repletas de sevillanos y visitantes dispuestos a disfrutar de esta tierra y bailar al compás dela caja flamenca. ¡Olé, olé y olé!
La sevillanas y sus trajes de colores
En la lista de razones por las que no te puedes perder la Feria de Abril no podía faltar la vestimenta. Y es que es un hecho que una mujer vestida con un traje de flamenca siempre está deslumbrante.
Por su parte, los hombres van con traje corto, de camisa y corbata. Probablemente uno de los momentos más emocionantes de la feria es ver la entrada en el recinto ferial de los jinetes y amazonas vestidos para la ocasión. ¡Será como estar en una película!
El cante y el baile hasta que el cuerpo aguante
Como en cualquier fiesta que se precie, la música en la Feria de Abril es un constante, y por supuesto, el flamenco no podía faltar. En cada esquina se puede disfrutar de la música en directo, de los cantes y los bailes que a todos nos suenan.
Que no sabes bailar sevillanas, ¡no te preocupes! Contágiate del espíritu andaluz, no te cortes, y anímate a taconear sobre el albero. Otro de los placeres de la Feria de Abril que no te puedes perder en tu visita a Sevilla. ¡A disfrutarlo!
El pescaíto frito y el rebujito
El primer sábado de Feria a medianoche, tras el encendido, tiene lugar el primer gran encuentro gastronómico de las fiestas. A esta noche se la conoce como la “Noche del pescaíto” y en las casetas se cena pescado frito acompañado con embutidos, tortilla de patata y con el típico rebujito.
¡Pero cuidado, novatos! Esta deliciosa bebida hecha con manzanilla o vino fino y refresco de limón con gas, se bebe con mucha facilidad. ¡Es perfecta para aliviar el calor! Pero también es posible que después de unos cuantos rebujitos esta bebida se vuelva en tu contra. Así que precaución, ¡que no queremos que te pierdas la Feria de Abril! Si queréis disfrutar de la gastronomía andaluza no dejéis de hacer esta cata de vinos y tapas.
La Calle del Infierno
¡Bienvenidos a la Calle del Infierno! Durante los días de Feria, esta vía se convierte en el lugar en el que se concentran todos los niños de la ciudad. Pero, ¿de dónde crees que viene su nombre? Como era de esperar, hace gala a la paciencia de los padres, tíos y abuelos que acceden a llevara los niños a ‘los cacharritos’.
Este parque de atracciones ubicado junto al Real, ocupa una superficie de 87000 metros cuadrados, y cuenta con cerca de 400 actividades destinadas a la diversión de público de todas las edades. El látigo, los coches locos, el barco vikingo o la noria son algunas de las que nunca faltan. ¡Un lugar icónico que no te puedes perder en la Feria de Abril!
El arte y la alegría de los sevillanos
Otro de los puntos fuerte de la Feria de Abril y algo que no te puedes perder es relacionarte con la gente local. Contagiarte del espíritu de los sevillanos es muy fácil en estos días. ¡Las calles rebosan alegría!
Da igual que sea tu primera vez en Feria, el calor de su gente te conquistará y te animará a vivir cada minuto de fiesta como si fuera el último. ¡Harás buenos amigos con toda seguridad! Y es que esta fiesta es un espacio de unión, tradición y arte que se hace palpable en cada esquina del Real. Os animamos a completar la experiencia realizando un paseo en calesa por Sevilla. ¡Una experiencia única!
El fin de fiesta
Si has aguantado hasta el último día de la Feria de Abril, otro de los eventos que no te puedes perder la despedida. Hasta el año que viene se pone fin a la fiesta con un gran espectáculo de fuegos artificiales, y lo que comenzó con el ‘alumbrao’, se termina de nuevo con un juego de luces.
Si queréis verlo en todo su esplendor, el Muelle de las Delicias es una buena ubicación, junto al río Guadalquivir. Y ya para finalizar, no podéis dejar de hacer este paseo en barco por Sevilla. ¡El broche de oro perfecto!