#CivitatisInsider: Óscar Fernández, Head of Communications

Es el turno de conocer al Head of Communications de Civitatis, Óscar Fernández. Este madrileño de 27 años, se define como una persona divertida y con una mentalidad abierta.
Viajero empedernido, Óscar estudió Periodismo y, posteriormente, un máster en Marketing y Comunicación y un grado superior en Realización de proyectos audiovisuales y espectáculos, lo que le ha llevado a ser el responsable de la comunicación de la empresa. ¡Ahora ya sabéis quién está detrás de las redes sociales, entre otras cosas! Seguid leyendo el #CivitatisInsider para conocerle un poquito más.

¿Cómo te definirías?
Me considero una persona muy curiosa y con una mentalidad abierta. Por supuesto, esto encaja perfectamente con mi mayor pasión: viajar constantemente y tener siempre un nuevo destino en mente antes de haber regresado. Tengo la gran suerte de compartir esta pasión con mi novia, que también es una viajera empedernida.
Además, soy una persona bastante activa (no me gusta demasiado quedarme en casa, aunque siempre hay excepciones), amable y, por lo que percibo de mis seres queridos, divertida.
¿Cuál es tu función y puesto en Civitatis?
Soy el Head of Communications de Civitatis desde hace un año y medio, aproximadamente, aunque antes pasé felizmente por el departamento de Contenidos durante casi un año. Actualmente me encargo de la gestión y el liderazgo de la comunicación de la empresa en todas las áreas: envío de notas de prensa, redes sociales, email marketing, blog, etc.
¿Qué ocupa la mayor parte de tu jornada? Tanto laboral como personalmente
Laboralmente no tengo tiempo de aburrirme, la verdad. Todos los días dedico varias horas a la gestión de las redes sociales (siendo Instagram la que más tiempo me roba), al contacto con periodistas para el envío de notas de prensa o entrevistas, preparación y edición de newsletters, coordinación del blog… Así como otras urgencias a nivel de comunicación que van surgiendo (que en 2020 no han sido pocas).
¿De dónde eres? ¡Cuéntanos algo chocante de tu zona!
Soy madrileño de toda la vida, de esos que cuando van por ahí dicen que como el agua de Madrid, ninguna. Nací y crecí en la zona del Paseo de Extremadura, a un paso de la Casa de Campo y a dos de la zona centro de la capital, por lo que en ese sentido me considero muy afortunado.
Como curiosidades, puedo decir que un pintor de la talla de Francisco de Goya ha vivido en mi barrio (donde aún hay placas conmemorativas e incluso algún mural de arte urbano de sus obras). Otra noticia llamativa que descubrí hace unos meses fue que muy cerquita de mi casa actual tuvo lugar la primera colonia de viviendas para obreros de Madrid, impulsada por la nobleza para honrar el matrimonio entre Alfonso XIII y Victoria Eugenia. De estas casas, ¡una sigue en pie justo al lado del colegio donde estudié! He pasado cientos de horas apoyado en esa esquina con mis amigos sin tener ni idea de toda la historia que escondían esos muros.

¿Cuántos países has visitado?
Afortunadamente me ha costado un rato recordar todos los países a los que he viajado, lo cual es buena señal, pero ahí van: Alemania, Austria, Bulgaria, Bélgica, Croacia, Dinamarca, Eslovaquia, Eslovenia, Estados Unidos, Francia, Grecia, Hungría, Inglaterra, Irlanda, Islandia, Italia, Luxemburgo, Malta, Marruecos, Países Bajos, Polonia, Portugal, República Checa, Serbia, Suiza, Tailandia y Turquía. En total 27, 28 si contamos la Ciudad del Vaticano… ¡Y 29 si contamos la “escala” que hice con mi novia atravesando el Mekong en Laos, en el Triángulo de Oro tailandés!
¿Cuál es tu favorito?
Sin lugar a dudas Italia, es un país por el que siento devoción desde que lo visité por primera vez en el típico viaje de Bachillerato allá por el 2010. Cuando ves por primera vez ciudades como Roma, Florencia o Venecia es imposible no enamorarte, pero es que si a esto le sumas su gastronomía, su historia, su música, su cine o su cultura, apaga y vámonos.
Cuatro años después de aquel viaje tuve la suerte de poder vivir en la Ciudad Eterna durante mi Erasmus, y repetí un par de años después para cursar un máster en Marketing y Comunicación, así que en ese sentido no puedo evitar considerarme un poco “itañol”.
¿Cuál fue el primer país extranjero que visitaste?
Francia. Fui con mi tía y mis primos a Disneyland París con cuatro años y repetimos la experiencia un par de años después (ya con padres incluidos). Mi tía debía de querer mucho a sus sobrinos para animarse a viajar al extranjero con cinco niños y dos adolescentes… Un viaje maravilloso del que todavía seguimos acordándonos hoy en día en las reuniones familiares.
¿Y el primer gran viaje que recuerdes?
Sin lugar a dudas, mi primer Interraíl en el año 2013. Visité junto a dos amigos trece países a lo largo de veintisiete días y ha sido una de las experiencias más enriquecedoras de mi vida.
Además, pese a que no hace tanto tiempo de ello, puedo decir que “eran otros tiempos” y que tres chavales de veinte años recién cumplidos nos apañamos perfectamente para exprimir al máximo un viaje sin Google Maps, sin WhatsApp… ¡E incluso sin los tours de Civitatis!

¿Qué destinos has visitado desde que trabajas en Civitatis?
Recuerdo que a las dos semanas de empezar a trabajar en Civitatis visité por primera vez Marrakech (de hecho, me daba hasta apuro pedir vacaciones a la que por aquel entonces era mi jefa, pero me atreví a hacerlo incluso el primer día). Más tarde, si no me falla la memoria, he visitado por primera vez destinos como Toulouse, Rabat, Islandia (ruta por todo el país preparando la guía para Civitatis, ¡uno de los viajes de mi vida!), Nueva York, Washington, Carcasona, Tailandia (¡inolvidable!), Sicilia, Bérgamo, el Lago de Como, Salzburgo, el Lago de Garda, Vicenza, Ferrara, Cinque Terre… También, y por razones obvias, he aprovechado los meses de mayores restricciones en cuanto a la movilidad para descubrir más la Comunidad Autónoma de Madrid, explorando lugares como Buitrago de Lozoya, Patones de Arriba o Chinchón. Eso sí, y sin menospreciar lo que tenemos más cerquita, estoy deseando volver a recorrer el mundo.
¿Cuál es la anécdota más graciosa que te ha sucedido viajando?
Cada viaje deja anécdotas de todo tipo, pero siempre que me hacen esta pregunta me suele venir a la cabeza una historia que viví con dos amigos en el Interraíl que he mencionado previamente. Eran las tres de la madrugada, aproximadamente, y nos encontrábamos en la desierta estación de tren de Nova Gorica, es decir, en la frontera entre Italia y Eslovenia.
Entre cabezada y cabezada apareció un hombre bastante extraño (físicamente se parecía a Juan el Golosina) que, mezclando italiano, esloveno (o eso creíamos), español e inglés, insistía amable aunque insistentemente en que una vez tomásemos el tren rumbo a Liubliana nos detuviéramos con él en Bled, pues quería enseñarnos un lago maravilloso con una “piccola chiesa in una piccola isola”, es decir, una pequeña iglesia en una pequeña isla. Tiempo después descubrimos que el hombre no mentía y efectivamente el Lago de Bled es así, pero en aquel momento nuestro sentido común y la memoria de películas como Hostel nos hicieron desconfiar de él.
Todavía recuerdo cómo, con las primeras luces del amanecer, este simpático extraño bajó del tren con otro grupo de mochileros (espero que estén bien) y aporreaba el cristal de la ventanilla para que nosotros también bajásemos. Aún seguimos riéndonos de aquella historia… ¡Y todavía tengo pendiente visitar el lago!
Nuestro sentido común y la memoria de películas como Hostel nos hicieron desconfiar de él
¿Cuál es tu próximo destino Civitatis?
Cualquiera al que pueda viajar, estoy impaciente. ¡Ojalá Egipto!
¿Y tu destino Civitatis soñado?
Son demasiados… Me gustaría conocer las Siete Maravillas del Mundo Moderno, así que Perú, Jordania o México están en la lista, pero también habría que mencionar la India, Japón, Indonesia, Vietnam, Egipto, Túnez…

¿Qué actividad de Civitatis te mueres por hacer?
Me encantaría poder volver a disfrutar del tour por el Vicente Calderón. Dado que esto va a resultar imposible, por desgracia, me conformaría con el transiberiano Moscú – Pekín, que tampoco está mal. Tampoco diría que no a algún circuito por Perú, Indonesia, Cuba o Jordania.
¿Free tour o tour de pago?
Si puedo elegir prefiero la visita guiada de pago: suele haber menos gente y, por qué no decirlo, con el descuento de empleado de Civitatis el precio normalmente no es mayor que la propina de un free tour. Ahora bien, haciendo honor a la verdad, al final lo que más he reservado en mis viajes son free tours, siendo muchos de ellos fantásticos.
¿Cuál es la mayor propina que has dado en un free tour y por qué?
Si mal no recuerdo, 15 € por cabeza en un free tour por Atenas: nuestro guía nos explicó absolutamente todo lo que necesitábamos saber de Grecia (desde la Antigüedad hasta la situación política y económica del momento) de una forma tan divertida que las más de cuatro horas de free tour (sí, le dimos cancha y se vino arriba) se nos pasaron volando.
¿Tours culturales… o de aventura y adrenalina?
Por lo general prefiero los culturales, pero también es verdad que he viajado mayoritariamente por Europa y en fin, no me voy a lanzar en tirolina por Piccadilly Circus. Cuando vaya a destinos exóticos sí que tengo ganas de vivir aventuras, por supuesto.
¿McDonalds y pizzerías o cocodrilo e insectos?
Por lo general pizzerías (no me gusta McDonald’s, aunque sí las hamburguesas, que conste), pero me gusta descubrir la gastronomía del país al que viajo y procuro basar mi dieta en sus platos tradicionales. Recuerdo que en un fin de semana en Marruecos un amigo mío estaba ya harto al segundo tajín mientras que yo estaba tan feliz: ¡me encanta comer recetas diferentes!
¿Viajar conectado o desconectar de todo?
Desconectar, y si conecto que sea solamente para aprovechar más el viaje (buscar información sobre monumentos, descubrir los mejores restaurantes, etc).
¿A qué época de la Historia te gustaría viajar?
Me gustaría viajar a la Antigua Roma, pero su historia es tan amplia que esto no es en absoluto concreto. Digamos que me gustaría conocer la Ciudad Eterna en su momento de máximo esplendor (puestos a elegir…): es decir, en los tiempos de Trajano.
¿A qué personaje célebre (vivo o muerto) te llevarías de pub crawl?
No sé si un pub crawl sería el ambiente ideal para conocerles, pero me gustaría charlar con personajes ilustres como Lorenzo el Magnífico, Leonardo da Vinci o Miguel Ángel Buonarroti.

¿Peli y manta o cena y copas?
Depende del momento, aunque si tuviera que elegir… Diría cena y copas.
¿Yoga o running?
Running, aunque puestos a preferir, me quedo con deportes como el pádel, el tenis o el fútbol.
¿Cine o teatro?
Consumo mucho más cine que teatro, así que me decanto por él si tengo que elegir. Eso sí, ir al teatro me encanta y me parece un plan de lo más especial.
¿Algún ritual antes de entrar a trabajar? ¿Y al salir?
Ninguno, más allá del café obligatorio en cuanto empiezo la jornada.
¿Cuál es tu canción más energizante?
Knights of Cydonia, de Muse. Desde que la descubrí jugando al Guitar Hero III se ha convertido en una de las canciones más épicas de la banda sonora de mi vida. Si tengo el ánimo más fiestero, otra canción que me pone a full es L’amour toujurs, de Gigi D’Agostino.
¿Y la serie que te roba horas de sueño actualmente?
Últimamente la serie que más veo es Seinfeld, aunque tanto como robar… Pese a que los capítulos duran poco más de veinte minutos, lo normal es que no aguante más de diez y el resto del episodio me lo vea al día siguiente. Además, este fin de semana he empezado la última temporada de Vikings, una de mis preferidas.
¿Tienes algún “placer culpable”?
No es raro que, mientras estoy preparando alguna nota de prensa o alguna otra tarea de carácter serio, esté escuchando a todo volumen listas de reggaeton en Spotify. Cualquier día se me cuela alguna de sus cuidadas rimas en una newsletter…