Los 10 timos para turistas más comunes en Turquía
Viajar siempre es un placer, pero a veces puede convertirse en toda una odisea. Como es mejor prevenir que curar, siempre merece la pena estar prevenido ante cualquier contratiempo que pueda surgir a lo largo de una escapada. Por ello, hoy en Civitatis queremos advertiros sobre los 10 timos para turistas más comunes en Turquía.
Los destinos del Mediterráneo oriental se han puesto muy de moda en los últimos años. De todos ellos, Turquía es uno de los más destacados. Ciudades como Estambul, Esmirna o Kusadasi atraen cada año a decenas de miles de turistas.
Sin embargo, hay que estar alerta para evitar llevarse un mal recuerdo de un país tan fascinante y cautivador como es Turquía. ¡Estad atentos a los siguientes consejos!
La carrera de taxi infinita, uno de los timos en Turquía más comunes
Tomar un taxi en Turquía puede provocar más de un quebradero de cabeza. Al ya de por sí caótico tráfico de Estambul y otras ciudades, se le suma le picaresca de algunos taxistas. Muchos de ellos ni siquiera son taxistas profesionales, y los que sí lo son realmente a veces suelen dar más vueltas de lo debido.
Es importante por tanto que, antes de tomar un taxi, comprobéis que el trayecto que vais a realizar se ajusta a un precio estandarizado. Debéis tener mucho cuidado también con los taxis piratas. Si el automóvil no lleva taxímetro ni un distintivo oficial que lo acredite como vehículo de servicio público, desconfiad al instante.
Regateos imposibles en el Gran Bazar
El Gran Bazar es una de las visitas imprescindibles de Estambul. Otras ciudades turcas también cuentan con populares bazares en los que los turistas suelen regatear. Un craso error. Nunca intentéis regatear con el comerciante de un bazar turco porque, aunque penséis que habéis conseguido una ganga tirada de precio, si el vendedor ha conseguido que paguéis una cierta cantidad, dad por seguro que ha sido porque ha inflado los precios.
Ajustaros siempre a un precio fijo y, si os parece una cantidad desorbitada, probad en otro puesto o mercado. Los vendedores son muy experimentados y saben perfectamente cómo “regatear los regateos” de los turistas. Negociar los precios con los comerciantes turcos no es una buena idea. Además, tened en cuenta que muchos de los productos que ofrecen los bazares también están a la venta en centros comerciales y tiendas especializadas donde los precios son fijos.
Limpiabotas demasiado amables, uno de los 10 timos más comunes en Turquía
La escena es muy frecuente en Estambul y otras ciudades turcas, y consiste en los siguiente. Un limpiabotas se acerca a un grupo de turistas y, “por mero descuido”, deja caer uno de sus cepillos y se aleja del grupo. Cuando uno de los miembros del mismo se da cuenta, se acerca al limpiabotas para devolverle el cepillo. En “agradecimiento”, el limpiabotas se ofrece a limpiarle “gratis” los zapatos al turista que le ha devuelto su cepillo.
Sin embargo, al terminar el servicio (por el que un turco no pagaría más de 3 euros), el limpiabotas le cuenta al turista que lo está pasando muy mal, y le “recomienda” que le pague por el servicio una cantidad que puede llegar hasta los 10 euros. Así que mucho cuidado. Si veis un cepillo en el suelo, mejor olvidaros de él y no intentéis devolvérselo al limpiabotas que lo ha dejado ahí “por descuido”.
El cambio de divisa, un clásico de los timos
Engañar con el cambio de divisas es uno de los 10 timos para turistas más comunes en Turquía. La lira turca (TL) es la moneda oficial del país. ¡Pero ojo! Esta divisa entró en vigor el 1 de enero de 2009, sustituyendo a la Nueva Lira Turca que se implantó en 2005. Sin embargo, en muchas oficinas ilegales de cambio de divisas es posible que os den “gato por liebre” y os ofrezcan una moneda que ya no está en circulación.
La lira turca cotiza de forma ostensiblemente más baja que otras grandes divisas internacionales como el euro (EUR), el dólar estadounidense (USD) o la libra esterlina (GBP). No obstante, es bastante común que en muchas oficinas de divisas inflen los cambios de moneda.
Trasplantes capilares fraudulentos
Hacerse un trasplante o injerto de pelo en Turquía ha convertido a este país mediterráneo en una de las principales potencias del sector capilar. Si se hace correctamente en una clínica autorizada, no debería haber ningún contratiempo. El problema se produce cuando estas prácticas se llevan a cabo en centros ilegales no regulados.
De hecho, es muy frecuente que el personal de estos centros acuda a los principales puntos turísticos en busca de turistas con una alopecia pronunciada o directamente calvos. Desconfiad totalmente de ellos. Los injertos capilares solo deben realizarse con cita previa en centros especializados debidamente acreditados.
El guía turístico indeseado, uno de los 10 timos para turistas más frecuentes en Turquía
Otro clásico de los clásicos. Un ciudadano turco aparentemente amable y despreocupado se acerca a una pareja o un grupo reducido de turistas y les intenta hablar en el idioma propio de dichos turistas, contándoles anécdotas y curiosidades de la ciudad de forma supuestamente espontánea. Cuando esa pareja o grupo de turistas intenta alejarse del inesperado “guía turístico”, éste les exige un precio por sus “servicios”.
Por tanto, si alguien se os acerca y empieza a hablaros en vuestro idioma sin haberle preguntado nada, desconfiad al instante. Lo ideal, como ya sabéis, es apostar por un guía profesional como los que ofrecemos en Civitatis.
Un fotógrafo por sorpresa
Este timo para turistas, otro de los grandes clásicos de Turquía, resulta muy parecido al interior. Alguien se acerca a una pareja o grupo de turistas que están intentando hacerse una foto, y se ofrece de forma voluntaria a hacerles dicha instantánea. Cuando ya ha terminado la “sesión fotográfica”, exige un precio por haberos retratado frente a uno de los lugares más icónicos de la ciudad.
Se trata de un timo en toda regla, y además peligroso, ya que si no entregáis la cantidad que os pide, este “fotógrafo” puede huir con vuestra cámara, teléfono móvil o tableta.
Aperitivos extra en los restaurantes
Comer en un restaurante turco es todo un placer. La gastronomía de Estambul y de otras ciudades turcas ofrece una amplia variedad de platos que combinan a la perfección lo mejor de la cocina mediterránea y árabe.
No obstante, no todos los restaurantes son muy honrados. En algunos de ellos, os pondrán aperitivos que no habéis pedido. Sí, están deliciosos, pero cuando os traigan la cuenta ya no os parecerán tan ricos… Para evitar este contratiempo, lo más recomendable es que, antes de hincar el diente, pidáis a los camareros que os retiren de la mesa todo aquello que no habéis pedido.
Mapas de la ciudad “gratuitos”
Uno de los 10 timos para turistas más comunes de Turquía. En puntos estratégicos, como la mezquita de Santa Sofía en Estambul o las formaciones rocosas de la Capadocia, se coloca una persona que ofrece de forma “desinteresada” mapas y folletos turísticos, o incluso se los muestra a los grupos de las visitas guiadas.
Nunca cojáis nada que os ofrezcan de manera desinteresada. Os cobrarán por esos mapas o folletos, que podréis obtener gratis en cualquier oficina legal de turismo.
Un té de “cortesía”
Es bastante común que al entrar en un comercio os ofrezcan un típico té turco. Esta práctica también se lleva a cabo en bazares e, incluso, peluquerías y otros establecimientos. Es posible que para los propios turcos sí que sean realmente de cortesía y gratuitos estos tés. Pero no para los turistas, a los que se les cobrará por estas infusiones.
Como ya os hemos aconsejado, es mejor que rechacéis todo aquello que os ofrezcan de manera desinteresada.